Los inconformes denunciaron una farsa de contienda electoral, toda vez que con total falta de equidad y sobre todo paridad de género, el violentador de mujeres será impuesto el próximo domingo 12 de Octubre.
A pesar de haber protagonizado un episodio de violencia física contra una mujer hace apenas unos meses, Roberto Pérez Delgado, actual presidente municipal con licencia ha lanzado su intención de reelegirse en el cargo, desafiando el descontento social y las exigencias de justicia.
El caso, que causó fuerte indignación en redes sociales tras viralizarse imágenes del hecho, no derivó en ninguna sanción o castigo por parte de las autoridades competentes.
Pérez Delgado simplemente se separó del cargo de forma momentánea, sin consecuencias legales ni administrativas por su proceder.
El ex compañero de fórmula de la hoy senadora Laura Estrada Mauro por el Partido Verde Ecologista de México (PVEM), con total impunidad y sin mostrar el menor signo de responsabilidad política o ética, busca nuevamente gobernar el municipio, provocando indignación entre sectores sociales y activistas, especialmente entre mujeres que denuncian un contexto sistemático de misoginia, machismo y cacicazgo en San Pedro Ixtlahuaca.
De acuerdo con voces críticas dentro de la comunidad, varios actores políticos locales—en su mayoría hombres—pretenden nuevamente manipular los Sistemas Normativos Internos (SNI) para evitar que una mujer acceda al poder municipal, perpetuando así, prácticas patriarcales que han impedido históricamente una verdadera paridad de género en la toma de decisiones.
Por lo cual denunciaron una farsa de contienda electoral, toda vez que con total falta de equidad y sobre todo paridad de género, el violentador de mujeres será impuesto el próximo domingo 12 de Octubre.
Activistas denuncian también que Pérez Delgado mantiene presencia permanente en eventos de Morena, en lugar de atender los asuntos del municipio, el cual se encuentra en un claro abandono institucional.
La falta de rendición de cuentas y el uso político de su figura como «puente» entre los partidos (Morena – PVEM) ha encendido alertas sobre su legitimidad para competir nuevamente por el cargo.
La comunidad de San Pedro Ixtlahuaca exige una revisión profunda del caso y que se garantice una contienda justa, libre de violencia política y de género, en la que se respeten los derechos de todas las personas a participar en condiciones de equidad.