Agencias | Internacional
Un grupo de relatores de la ONU en derechos humanos pidió hoy a las autoridades de México que garanticen la seguridad de los activistas en este país, en particular en el estado de Oaxaca, donde sólo este año diez han sido asesinados.
En una declaración difundida en Ginebra, los relatores recuerdan el primer aniversario de la desaparición del abogado Ernesto Sernas García, quien defendía a 23 miembros de la organización Corriente del Pueblo Sol Rojo -de ideología marxista-leninista-maoísta- y quienes habían sido imputados por terrorismo.
Esa acusación tiene que ver con su participación en 2015 en protestas contra la reforma educativa, que según los relatores de la ONU habían sido pacíficas.
Asimismo, denunciaron que otros miembros de esa misma organización son objeto de amenazas e intimidación, y mencionaron el asesinato el pasado 11 de abril de uno de sus líderes, Luis Armando Fuentes, quien defendía en particular los derechos de los indígenas.
Afirmaron que ése y otros ataques sufridos por miembros de la organización están directamente relacionados con su resistencia al desarrollo de megaproyectos mineros y energéticos en Oaxaca, una temática en la que Sernas trabajaba en el momento de su desaparición.
Según los datos que aportaron los relatores, desde que empezó 2019 hubo 14 activistas muertos de forma violenta en México, frente a 13 durante todo el año pasado, y una decena de ellos vivían en Oaxaca.
Los relatores firmantes son los especializados en la situación de los defensores de los derechos humanos, sobre las ejecuciones extrajudiciales, la libertad de reunión pacífica y el derecho a la libre opinión, así como un representante del Grupo de Trabajo de la ONU sobre Desapariciones Forzadas.