El Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG) libra cruentas batallas en diversos estados del país, con la intención de expandir su control en la manufactura y el tráfico de drogas sintéticas como son la metanfetamina y el fentanilo, así como en el secuestro y la extorsión.
Para ello, el cártel liderado por Nemesio Oseguera “El Mencho” enfrenta no sólo a sus enemigos y al gobierno, sino incluso a ex amigos quienes de alguna manera, le han hecho más daño.
De acuerdo con informes de inteligencia del gobierno mexicano y estadounidense, el Cártel Jalisco Nueva Generación es uno de los seis cárteles más peligrosos de México, así como uno de los cinco grupos delictivos transnacionales más peligrosos del mundo. Sus métodos de intimidación y terror han sido comparados con los del Estado Islámico.
El CJNG tiene presencia en los estados de Aguascalientes, Baja California, Baja California Sur, Chiapas, Chihuahua, Puebla, Nuevo León, Querétaro, Quintana Roo, San Luis Potosí, Sinaloa, Jalisco, Tamaulipas, Colima, Michoacán, Morelos, Guanajuato, Nayarit, Guerrero, Veracruz, Estado de México y Ciudad de México; pero en al menos 5 de ellos, la lucha por el control absoluto ha derivado en actos verdaderamente atroces que han dejado decenas de muertos.
Michoacán
El Cártel Jalisco Nueva Generación se abre paso a sangre y fuego por el control de Michoacán. Las disputas principales en esta entidad son con el cártel de Los Viagra y con las autodefensas del municipio de Tepalcatepec encabezadas por Juan José Farías Álvarez, alias “El Abuelo”.
Este territorio, ubicado en la costa occidental de México, es uno de los principales puntos de producción y distribución de drogas, en especial de las metanfetaminas y otras sustancias sintéticas, aunque durante los últimos años, además, han proliferado la extorsión, el cobro de piso y los secuestros. También forma parte de la Tierra Caliente y cuenta con uno de los principales puertos marítimos (Lázaro Cárdenas), por lo que su importancia para el crimen organizado es prioritaria.
El encarnizado enfrentamiento entre Los Viagra, liderado por Nicolás Sierra Santa alias “El Gordo” ex líder de las autodefensas y el Cártel encabezado por “El Mencho” ha dejado decenas de muertos en el estado, pero alcanzó su punto máximo el pasado 09 de agosto cuando el CJNG se atribuyó el asesinato de 19 personas, presuntos miembros de Los Viagras, cuyos cadáveres fueron abandonados en tres zonas del municipio de Uruapan.
Algunos los dejaron colgando en puentes, otros fueron encontrados desmembrados. La noticia trascendió incluso a nivel internacional.
Tras los hechos, no se reportaron personas detenidas.
El otro frente del CJNG en Michoacán es con Juan José Farías Álvarez, alias “El Abuelo”, quien hace algunos años fue aliado de “El Mencho”. Ambos formaron parte del Cártel de “Los Valencia”, organización criminal que desapareció y derivó en el Cártel Jalisco Nueva Generación.
La desaparición del Cártel de Los Valencia obligó a “El Abuelo” a quedarse en las filas de La Familia Michoacana. Pero, al dividirse ésta, Farías Álvarez saltó a Los Caballeros Templarios.
La ambición y aparición del Cártel de Jalisco Nueva Generación lo pusieron de nuevo al servicio del sicario más peligroso de México: Nemesio Oseguera, “El Mencho”.
En 2013, Farías Álvarez encabezó un movimiento de autodefensas en Tepalcatepec para luchar contra los abusos del grupo criminal Los Caballeros Templarios, que en realidad se trató de una lucha disfrazada que pretendía quitarle la entidad al cártel liderado por Servando Gómez “La Tuta” para entregárselo a “El Mencho”.
“La Tuta” fue capturado en 2015, por lo que Michoacán dejó de ser una prioridad. Entonces, el CJNG se hizo de la entidad junto con algunas autodefensas.
La ruptura entre “El Abuelo” y “El Mencho” aún es un misterio; sin embargo, en un video difundido en redes sociales, el CJNG culpa a “El Abuelo” de entrometerse en una disputa y apoyar a “Poncho de los Reyes”.
El CJNG y “El Mencho” le pusieron precio a la cabeza de “El Abuelo” y a algunos de sus colaboradores más cercanos. Mediante un mensaje distribuido por redes sociales, se ofrecía una recompensa de 3.000.000 de pesos por Juan José Farías Álvarez, seguido por Uriel Farías alias “El Paisa” por cuyo paradero se ofrecían 2.500.000 de pesos.
Pero el pasado 30 de agosto, un comando de sicarios del Cártel Jalisco Nueva Generación incursionó en el municipio de Tepalcatepec en busca de “El Abuelo”, hecho que derivó en un enfrentamiento que duró casi 4 horas y dejó un saldo de 9 muertos y 11 heridos.
Tras el enfrentamiento, la gente de “El Abuelo” difundió un video grabado por un dron, en el que se mostraban cómo quedaron las camionetas y los cuerpos de las personas asesinadas (presuntos sicarios del CJNG) sobre una carretera.
Dos días después, autodefensas de Tepalcatepec reportaron una nueva incursión del CJNG que derivó en otra balacera, aunque no se informó de personas fallecidas o heridas.
Los hechos derivaron en la implementación de un protocolo de seguridad que incluyó la construcción de barricadas para impedir nuevos ingresos al municipio, así como la suspensión de clases (que fueron reanudadas este lunes 09 de septiembre) y cancelación de los festejos patrios.
Los habitantes del municipio realizaron marchas para exigir a las autoridades paz y tranquilidad.
Guanajuato
Desde hace ya varios años, el estado de Guanajuato vive una violencia sin precedentes, generada principalmente por los cárteles del narcotráfico, que también se dedican al secuestro, la extorsión y al robo de combustibles.
La violencia se ha recrudecido debido a la disputa entre el Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG) y el Cártel de Santa Rosa de Lima, liderado por José Antonio Yépez Ortiz “El Marro” el cual se dedica principalmente al robo de combustible, conocido como “huachicoleo” y a la extorsión.
La enemistad entre ambos grupos delictivos surgió desde 2017, pero en las últimas semanas los enfrentamientos armados por el control de la zona denominada El Triángulo de las Bermudas (Guanajuato) han teñido de rojo a la entidad.
Aunque “El Marro” lleva una década dedicado al robo de combustible (en las ciudades de Apaseo El Grande, Salamanca, León, Irapuato y Celaya, así como la pequeña población de Santa Rosa de Lima, cuyo nombre tomó la célula), cobró notoriedad en octubre de 2017, tras enviar una fuerte advertencia al CJNG. En un video los maldice y los conmina a mantenerse fuera de Guanajuato.
Desde entonces, la sangrienta guerra entre ambos grupos ha disparado la violencia en la entidad, lo que lo ha convertido en el estado con el mayor número de homicidios dolosos.
Durante el primer trimestre de este año, Guanajuato registró 947 asesinatos. En el 2018 ocurrieron 2,367 homicidios.
Jalisco
Jalisco también ha sido escenario de los violentos actos del Cártel liderado por “El Mencho”. Fue en este estado donde quedó demostrado su poderío.
El 27 agosto de 2012, se rumoró que Nemesio Oseguera Cervantes había sido capturado”, lo que desató una ola de veintiocho narcobloqueos en la zona metropolitana de Guadalajara y diversos municipios, así como otros seis en el estado de Colima.
Versiones periodísticas señalan que Nemesio Oseguera estuvo detenido durante dos horas pero que fue liberado por órdenes del entonces gobernador de Jalisco, el panista Emilio González Márquez. La liberación habría contado con el apoyo del Gobierno federal, encabezado por Felipe Calderón.
El 30 de abril de 2015, el entonces gobernador Aristóteles Sandoval Díaz aseguraba que en Jalisco todo estaba bajo control. Insistió que la fuerza pública estatal era suficiente para combatir la delincuencia organizada, sin necesidad de las federales. Y aunque reconoció el gran poder que ha acumulado el CJNG, aseveró: “Lo tenemos acotado”, e incluso aseguró que los narcobloqueos eran “cosa del pasado, de la administración anterior” (del gobernador Emilio González Márquez).
Horas después, la mañana del 1 de mayo, el Cártel Jalisco Nueva Generación mostró su fuerza al derribar un helicóptero de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) con dieciocho militares y policías federales que perseguían a Nemesio Oseguera Cervantes y a su estado mayor. El saldo oficial fue de seis efectivos y ocho presuntos delincuentes muertos, más varios heridos.
Momentos más tarde, Jalisco ardía en cincuenta y cinco puntos de treinta y dos municipios, incluida la zona metropolitana de Guadalajara. En intersecciones de avenidas y cruces estratégicos de carreteras se obstruyó el tránsito, atravesando autos, camiones pesados y autobuses urbanos, casi todos en llamas.
También prendieron fuego a once sucursales bancarias, a varias gasolineras y a otros negocios. Los bloqueos de calles e incendios se extendieron a Michoacán, Colima y Guanajuato. El pánico se apoderó de la población.
Desde ese entonces a la fecha, el CJNG ha dejado en Jalisco decenas de muertos y desaparecidos, muchos de ellos elementos de seguridad del estado e incluso, de las fuerzas armadas.
El pasado mes de agosto, el Cártel Jalisco Nueva Generación divulgó un video en el que un sujeto que aseguraba ser Nemesio Oseguera “El Mencho” acusó al gobernador de Jalisco, Enrique Alfaro, de haber roto el pacto que tenían para controlar la plaza.
En el video de más de 5 minutos de duración, el supuesto “Mencho” asegura que el gobernador Enrique Alfaro pretende darle la plaza a Martín Coronel alias “El Águila” (sobrino del extinto Ignacio Coronel, mano derecha de Joaquín “El Chapo” Guzmán, ex líder del Cártel de Sinaloa) y a Esteban Rodríguez Olivera, alias “El Güerito”.
De acuerdo con la periodista Anabel Hernández, desde 2018, el Departamento de Justicia del Gobierno de Estados Unidos (DOJ, por sus siglas en inglés) investiga a Alfaro por sus presuntos vínculos con el narcotráfico.
El gobierno de Jalisco desmintió la veracidad del clip y anunció que presentaría una denuncia penal ante la Fiscalía General de la República (FGR) para deslindar responsabilidades.
Veracruz
Veracruz, otra de las entidades azotada por la violencia del crimen organizado, es escenario de la disputa entre el Cártel Jalisco Nueva Generación y Los Zetas desde hace varios años.
En septiembre de 2011, cuando el gobierno de Javier Duarte apenas llevaba 10 meses, dos camionetas que llevaban al menos 35 cadáveres (23 hombres y 12 mujeres) fueron abandonadas frente a la plaza comercial Las Américas, la más concurrida del municipio de Boca del Río, a unos cuantos metros del Centro de Convenciones del World Trade Center (WTC).
El hecho fue considerado como la tercera masacre más grande desde que se inició la guerra contra el narcotráfico en 2006, sólo después de las del ataque al Casino Royale en Monterrey y la de la masacre en San Fernando, Tamaulipas.
Dos días después, los procuradores y presidentes de los Tribunales de Justicia en Veracruz mantenían una reunión bajo un fuerte dispositivo de seguridad, cuando integrantes del crimen organizado abandonaban 14 cadáveres en el Puerto de Veracruz y otra vez, en Boca del Río.
Los 14 cuerpos presentaban huellas de tortura y se encontraban semidesnudos. Entre las víctimas había una mujer. Las notas periodísticas del caso indicaron que los asesinos pertenecían al Cártel de Sinaloa, mientras que las víctimas eran de Los Zetas, aparentemente. Este último grupo criminal se había apoderado en 2010 del puerto de Veracruz.
La interminable violencia del crimen organizado en estas tierras, ha colocado a Veracruz en el sexto lugar a nivel nacional en el número de homicidios. Tan sólo en el mes de julio de este año, ocurrieron 196 homicidios.
También es la entidad en donde se han encontrado el mayor número de fosas clandestinas. Tan sólo del 2017 al 2018, fueron localizadas 343 fosas en 44 municipios veracruzanos, con miles de restos humanos.
En 2016 el Colectivo Solecito, conformado por madres de desaparecidos en la entidad,encontró la fosa clandestina más grande del país. Estaba ubicada en el predio Colinas de Santa Fe, ubicado en las inmediaciones de la entrada principal del Puerto de Veracruz, la ciudad más poblada de ese estado.
El pasado 27 de agosto ocurrió otra de las masacres que han dejado una profunda huella en la sociedad mexicana. Ese día una persona llegó al bar El Caballo Blanco, ingresó al sitio, disparó a algunos asistentes y lanzó bombas molotov para que el local se incendiara. Dentro murieron 25 personas y 13 resultaron lesionadas de gravedad. Hasta el momento ya suman 31 personas fallecidas.
Horas después del ataque, el gobernador Cuitláhuac García acusó a Ricardo “N”, alías “La Loca” de haber sido el autor de los hechos e incluso aseguró que este sujeto ya había sido detenido en dos ocasiones, pero que la Fiscalía de Veracruz lo dejó libre. La Fiscalía estatal desmintió al gobernador y aseguró que quienes pusieron a “La Loca” en libertad, fue la Fiscalía General de la República (FGR).
Mediante un video difundido en redes sociales, el mismo acusado Ricardo “N” desmintió que haya sido el autor del atentado. Aseguró que desde hacía tiempo había huido de Coatzacoalcos porque temía por su vida y la de su familia.
La Fiscalía General de la República anunció que atraería el caso, luego que de el presidente mexicano Andrés Manuel López Obrador hiciera la petición para que se realice una investigación a fondo y anunció que no solo se castigará a los autores materiales, sino también a las autoridades que hayan incurrido en corrupción al dejar en libertad a quienes cometieron el ataque.
El sábado 7 de septiembre, López Obrador reveló que que un jóven de 15 años de edad, es uno de los responsables de haber provocado el incendio en el bar. Incluso aseguró que como consecuencia del ataque, este sujeto tiene quemaduras en la mitad de su cuerpo.
Hasta el momento no ha sido revelada su identidad ni a qué grupo criminal pertenece.
Tamaulipas
Desde el inicio de la llamada “guerra contra el narcotráfico” Tamaulipas ha sido uno de los escenarios donde se han llevado a cabo varias de las peores atrocidades relacionadas con el narcotráfico y el crimen organizado.
El control por el estado fronterizo se lo disputaban el Cártel del Golfo, Los Zetas y el Cártel de Sinaloa; pero tras las capturas y asesinatos de sus principales líderes, otras organizaciones criminales se pelean la plaza a sangre y fuego, ocasionando un recrudecimiento de la violencia en la que en innumerables ocasiones, la población civil ha quedado en medio.
El Cártel del Noreste (creado por Ana Isabel Treviño Morales, hermana de Miguel Ángel y Omar Treviño, líderes del Cártel de Los Zetas) y su brazo armado denominado “La Tropa del Infierno”, mantienen una lucha encarnizada contra el Cártel del Golfo con la intención de dominar el estado, pieza clave en el trasiego de drogas hacia los Estados Unidos.
Funcionarios que integran el gabinete de Seguridad Nacional revelaron que se han detectado alianzas entre células del Cártel Jalisco Nueva Generación y el Cártel del Golfo en Tamaulipas y Nuevo León con la intención de expandirse.
La lucha por esta plaza, principalmente por la ciudad de Nuevo Laredo (la cual es dominada por Juan Gerardo Treviño Chávez, alias “El Huevo”), mantiene a la ciudad fronteriza ahogada en feroces enfrentamientos en los que han quedado atrapados civiles.
Hace unos días, el Cártel del Noreste habría difundido un mensaje en el que declaran la guerra a las fuerzas de seguridad de Tamaulipas y piden a los pobladores no salir de sus viviendas para que eviten quedar en medio del fuego cruzado.
Dado los niveles de violencia por los que atraviesa Tamaulipas, en días pasados, empresarios y miembros de la sociedad civil solicitaron al gobierno la llegada de fuerzas de la paz de la ONU, conocidos como Cascos Azules, para que enfrenten al Cártel del Noroeste.
Además del trasiego de drogas, el Cártel del Noreste está involucrado en delitos como tráfico de personas, robo de combustible, secuestro y extorsiones a comerciantes.