Con la presencia de Yalitza Aparicio, como invitada especial al primer Lunes del Cerro, la máxima fiesta de los oaxaqueños se desarrolló sin contratiempos en la rotonda de las azucenas, en su edición matutina y vespertina.

Mientras al exterior del auditorio, un grupo de damnificados de Juchitán de Zaragoza protestaron en demanda de los apoyos para reconstruir sus viviendas a dos años del terremoto del 7 de septiembre, y en las calles de la ciudad la organización Antorcha Campesina realizó una marcha contra el gobierno estatal, en el auditorio Guelaguetza, casi 12 mil almas vibraron al son de los bailes, sones y chilenas de las delegaciones representantes de las 8 regiones del estado.

Ahí, el gobernador Alejandro Murat, su esposa Ivette Morán, así como los secretarios de Turismo federal, Miguel Torruco Marqués, y de Cultura, Alejandra Frausto, así como funcionarios de gabinete disfrutaron del espectáculo multicolor y la pasaron de lo mejor.

Mientras que la joven Yalitza, la docente que trascendió a la pantalla grande para dar vida al personaje de Cleo en la película Roma, robó miradas, pero está vez no hubo disposición de brindar una entrevista a medios locales.

Pese a ello, miles de espectadores, turistas extranjeros y locales, se contagiaron de la alegría, de cultura y belleza multicolor.

Las delegación encargada de abril la Guelaguetza fueron las Chinas oaxaqueñas al ritmo del jarabe del Valle.

Las mujeres del Istmo a través de la delegación de Chicapa de Castro mostraron la elegancia de sus mujeres a través de sus huipiles bordados de flores multicolor.

La Canción Mixteca, el himno de los oaxaqueños, despertó en hondeo de sombreros de todo el auditorio al ritmo de los acordes; en seguida despertó la admiración de los bailarines de la Heroica Ciudad de Tlaxiaco, de donde es originaria la actriz oaxaqueña Yalitza.

También el auditorio resonó con el baile Flor de Piña, mujeres ataviadas de huipiles multicolor, propios de cada una de las zonas que conforman la Cuenca, la región Piñera que ubica a Oaxaca en el 3er lugar nacional en producción de esta fruta.

Y para cerrar la edición matutina, la picardía de Putla Villa de Guerrero y la belleza de sus mujeres y el movimiento candente despertó los miles de aplausos.

En la edición vespertina Ejutla de Crespo y sus cantos picantes fue motivo de gritos en apoyo a los danzantes. Las costumbres y tradiciones de Santa María Tlahuitoltepec se hicieron presentes con los sones y jarabes mixes.

Así se dio el cierre de la máxima fiesta de los oaxaqueños y en espera de la octava a celebrarse el próximo 29 de julio.