* Advierte Jorge González Ilescas que se corre el riesgo de pasar de un estado mínimo a un estado ausente e irresponsable ante la pobreza
“Coincidimos con lo establecido en el Plan Nacional de Desarrollo 2019 – 2024 (PND) en el sentido de que el Estado debe recuperar su fortaleza como garante de la estabilidad y articulador de los grandes propósitos nacionales, pero no a costa de los recortes presupuestales que plantea el presidente Andrés Manuel López Obrador y que pegarán directamente al campo mexicano”, refirió el presidente del CDE del PRI, Jorge González Ilescas.
Al fijar su posicionamiento acompañado de integrantes del Comité Directivo Estatal y de Amando Demetrio Bohórquez Reyes, secretario general de la Confederación Nacional Campesina (CNC), el líder del priismo oaxaqueño dijo que es preocupante que en el PPEF 2020 se ajuste drásticamente el presupuesto para el campo, porque ello significa el riesgo de pasar de un estado mínimo a un estado ausente e irresponsable ante la pobreza.
González Ilescas explicó que en el campo vive el 25% de la población de México y al campo ahora sólo se le está asignando el 5.4% del gasto total, lo que es inequitativo, ya que “es aquí donde trabajan los más pobres de los pobres”, acotó.
“Necesitamos programas sociales, pero también programas productivos. Damos la bienvenida a los programas que contribuyen a superar las condiciones de pobreza y marginación. No obstante –añadió– es necesario fortalecer esquemas de inclusión productiva, pues están en juego las condiciones de vida de millones de campesinos, pero también la producción sustentable y el abasto de productos básicos para la población”.
El líder del PRI Oaxaca alertó que resulta grave la drástica reducción que se propone a los programas con impacto productivo operados a través de la Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural (Sader), cuyo presupuesto se reduce de 65 mil 434.9 millones de pesos (mdp) en 2019 a 46 mil 253.1 mdp en 2020, lo que significa una disminución del 29.3 por ciento.
Advirtió que de no corregirse la propuesta, el país enfrentará una pronunciada caída de la producción agropecuaria y un marcado desequilibrio en la balanza comercial, así como una disminución en los ingresos de los productores rurales, además de deteriorar las condiciones de vida y estabilidad social en el medio rural.
“No se rescata al campo eliminando los programas productivos. Respaldamos el propósito expresado en el Plan Nacional de Desarrollo cuando se afirma que el gobierno federal se ha propuesto como uno de sus objetivos romper el círculo vicioso entre postración del campo y dependencia alimentaria y por ende impulsar la autosuficiencia alimentaria y el rescate del campo”, dijo González Ilescas.
Y añadió: “Eliminar o reducir los programas productivos resulta contrario al Plan Nacional de Desarrollo y los compromisos asumidos por el Presidente de la República”.
En este sentido, agregó que resulta fundamental trabajar con recursos suficientes por un campo ordenado con seguridad jurídica para todos los que viven en el sector rural.
Sobre la migración, el líder priista dijo que cumplir este propósito exige generar las condiciones económicas y sociales que permitan arraigar a la población en su tierra. “En el campo –refirió– eso se logra con esquemas de financiamiento, asistencia técnica, capacitación y apoyos al cultivo, producción y comercialización, medidas sanitarias y esquemas de aseguramiento, mismos que se ven afectados en la propuesta presupuestal. Un campo trabajando reconstituye el tejido social”, dijo enfático.
Por ello –terminó– confiamos que, mediante el diálogo constructivo con las autoridades, los legisladores federales y las organizaciones de productores, logremos generar los acuerdos que permitan por encima de colores políticos, reconstruir el presupuesto para el campo en beneficio de la población más vulnerable y de la estabilidad social y política del país.